Boca Juniors se clasificó a las semifinales de la Copa de la Superliga al vencer anoche por penales a Vélez Sarsfield 5 a 4 luego de empatar como en la ida 0 a 0, al cabo de un encuentro que, como en el que se jugó en Liniers, el arquero xeneize, Esteban Andrada, terminó convirtiéndose en figura por la superioridad de su rival.
Ahora Boca jugará con Argentinos Jrs. en una de las semifinales, y la otra la disputarán Tigre y Atlético Tucumán.
El partido se inició con superioridad boquense, ya que se lanzó en pos del gol desde el pitazo inicial del cuestionado árbitro Fernando Espinoza (sobre todo por la gente de Vélez).
Claro que a ese dominio boquense le faltó la pausa que solamente en el plantel es capaz de darle el lesionado Reynoso, y por consecuencia todo fue tan intenso como farragoso.
Es que los estandartes de ese impulso ofensivo eran Zárate, Villa y Tevez.
Es que la ausencia del desgarrado Ábila y la de Benedetto, que arrancó en el banco, fueron carencias que lo emparentaron con Vélez a la hora de tener que resolver en el área rival.
Por eso el ímpetu xeneize se fue apagando en la medida que los chicos de Vélez se fueron sacando de encima otra presión, la del marco, y empezaron a jugar.
Un mano a mano de Villa bien resuelto por el arquero Hoyos y un tiro libre de Zárate en el travesaño, resumieron las dos acciones de riesgo de Boca en el primer tiempo. En el medio hubo un claro penal de Mas a Laso que Espinoza ignoró.
Pero en la segunda mitad el partido tuvo un desarrollo diferente, ya que el fortín se despojó de sus ataduras iniciales y con presión alta y cierto vuelo futbolístico comenzó a entrarle a Boca por todos lados, hasta convertir a Andrada en figura.
Giménez y Almada incidieron para que Vélez generara muchas opciones obturadas por Andrada en forma sucesiva.
Tanta era la superioridad que marcaba Vélez que por impotencia Izquierdoz le cometió una violenta falta a Almada y fue expulsado.
Y si 11 contra 11 Vélez era más, ni que hablar en esos 10 minutos finales con superioridad numérica, cuando decididamente el fortín hizo los méritos como para llevarse la victoria.
Pero falló Vélez en la puntada final y también Braian Cufré en los penales, algo que no sucedió con los rematadores boquenses.
Alfaro se tomó revancha de una definición por penales anterior por Copa Argentina en la que Heinze le había ganado cuando él dirigía a Huracán, en la cancha de Argentinos Juniors, justamente el equipo al que Boca deberá enfrentar el próximo domingo a las 18.45 en el encuentro de ida de las semifinales en La Paternal.
Fuente El Tribuno
