POLITICA

Femicidio: Solicitan prisión preventiva para los cuatro imputados del asesinato de Daniela Paula Guantay

El fiscal Rodrigo González Miralpeix solicitó prisión preventiva para los cuatro acusados del homicidio calificado por mediar violencia de género de la joven ante la posibilidad de que en libertad, éstos pudieran eludir el accionar de la Justicia.

El fiscal penal 3 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Rodrigo González Miralpeix, solicitó prisión preventiva ante el Juzgado de Garantías 1 para Norberto Silvestre de 27 años, Carlos Alfredo Agüero de 33 años, Franco Aleman de 22 años y Julio César Monasterio de 28 años, imputados por el homicidio calificado por mediar violencia de género en perjuicio de Paola Daniela Guantay.

La medida cautelar fue solicitada por González Miralpeix en atención al riesgo procesal que existe de que los cuatro imputados puedan tratar de eludir el accionar de la justicia fugándose, fundamentado además en que considera que la investigación se encuentra en curso, estando pendiente la producción de diversas medidas de carácter esencial para la causa, tales como testimonios, pericias y otras diligencias.

Otro de los motivos que esgrime el fiscal en su solicitud es la posibilidad de que los imputados en libertad, pudieran obstaculizar la investigación influyendo en los testimonios de los personas que aun faltan declarar.

La desaparición

El 28 de febrero, Daniela Paola salió de su casa, en el barrio Juan Manuel de Rosas, en la zona norte de la capital. En la vivienda habían quedado sus tres pequeños hijos y Verónica Guantay, su mamá.
Pasaban las horas y ella no regresaba. La madre comenzó a preocuparse y al día siguiente fue a la Policía a denunciar su desaparición, pero, según dijo la mujer, en ese momento no quisieron tomarle la denuncia y le recomendaron que esperara, que ya iba a volver.

Pero eso no sucedió y recién dos días después, luego de llamar al 911, la madre pudo denunciar su desaparición y con ello iniciar el operativo de búsqueda desde la Policía.
Algunos vecinos le contaron que la habían visto el miércoles 1 de marzo, caminando hacia el río Mojotoro, junto a su pareja.

La madre dijo, entonces, que su hija había denunciado varias veces a su pareja por violencia de género. Y con eso la sospecha de un posible femicidio tomó forma y fuerza.

Hallazgo

El 7 de marzo, cerca de las 13.30, dos vecinos del barrio Juan Manuel de Rosas vieron restos humanos sobre una de las orillas del río Mojotoro. Sin perder tiempo avisaron a la Policía y un gran despliegue de efectivos y de peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales se hizo sobre el terreno pedregoso, cubierto de arbustos y malezas, a poco más de 50 metros de las últimas viviendas.

El cuerpo no estaba entero debido al paso de los días y probablemente a la intervención de animales. Los peritos levantaron un cráneo, parte de la columna vertebral y cabello. También había prendas de vestir, que la madre de Daniela reconoció apenas las vio.

La mujer no tenía dudas de que era su hija, pero para la Fiscalía Penal debía existir una identificación científica, y por ello se tomaron muestras de ADN a su familia y se cotejaron con los hallados en el cadáver.

El Tribuno